O este hombre es muy imbécil o nos cree muy imbéciles a los mexicanos.
Primero, la crisis de Estados Unidos sólo iba a ser una gripa en México.
Las declaraciones de Joseph Stiglitz, premio Nobel de economía, de que México era de los países del mundo que peor habían enfrentado la crisis, no le parecen válidas porque dice que Stiglitz ignora la situación de nuestro país, sugún la eminencia Carstens.
La baja de calificación de Fitch para hacer inversiones en México tampoco nos va a afectar.
La crisis en México ya se terminó.
Y ahora, con el crédito que acaba de otrogar el Banco Mundial a México todo se va a arreglar, aunque el Banco Mundial no piensa lo mismo.
¿Qué diablos tiene en su cabeza este hombre? ¿Cree que no nos damos cuenta? ¿Con qué derecho pretende seguir viéndonos la cara?
MACHETE…
Hace 14 años
La Secretaría General de la Comisión Económica Para América Latina y el Caribe (CEPAL) Alicia Barcena, en conferencia ofrecida en el Palacio de Pedralbes Barcelona, España hacia referencia a los efectos macroecnómicos de la crisis financiera iniciada en septiembre del 2008
ResponderEliminarLas diferentes políticas públicas implementadas por los países de América Latina en su conjunto han paleado, que no terminado, con los problemas a corto plazo de la economía (liquidez, estabilidad, infraestructura) Sin embargo, han sido insuficientes para acabar o enfrentar los grandes problemas de dichos países i.e. pobreza, inequidad, desempleo, entre otros.
No existe solución única y absoluta a dichos problemas; dichas soluciones, decía Alicia Barcena, deben responder a las necesidades y especialmente a las capacidades de cada país y sociedad. De tal forma, es necesario observar las características del país en cuestión y tratar de maximizar sus capacidades a través de políticas públicas basadas en la inversión pública y privada que sean sostenibles en el largo plazo.
Sin menospreciar las capacidades de Stiglitz (gran economista) fue uno de los que propuso y llevo a cabo, como director del Fondo Monetario Internacional en los años 90, los famosos ajustes económicos del Washington Consensus y cuyos efectos negativos seguimos aun pagando. Si bien es cierto la postura de Carstens es lógica, cabe aclarar que fuer simplemente una medida mediatica para salir del embrollo el culpar a la estructura económica.
El problema en México no es solo falta de voluntad política o falta de preparación (la cual a Carstens le sobra) sino más bien la incapacidad de producir políticas públicas que respondan a las necesidades de la nación y no a los intereses de algunos actores poderosos tales como Salomon Presburger de la Concamin; Gerardo Gutierrez de la Coparmex;Armando paredes del consejo coordinador empresarial entre otros. Adicionalmente, una flagrante incapacidad de generar acuerdos políticos a largo plazo.
Y bueno, habra que esperar a ver como se comporta Carstens como el sustituto de Guillermo Ortiz como el nuevo Director del Banco de Mexico (institución cada vez menos descentralizada)...